Berrea becerra

" Berrea becerra, berrea todo lo que quieras, que tu ya no vuelves a la cuadra, olvidate de la teta de la madre y de dormir la siesta en el prado al calor de sus ubres, ni de comer más trebol fresco, ni meter tu morro en la tierra fresca, lamiendo caracoles. Berrea becerra, pero tira hacia delante que la feria ya ha comenzado y espero que algún tratante se fije en ti, en tu lomo lustroso y me dé buenos reales con los que comprar unos pendientes de azabache y corales a Hermelinda y que el domingo me haga caso a la salida de misa en San Cibrián. Berrea becerra, pero no pares que todavía nos falta un buen tramo y el sol ya se está levantando, no te metas en el barro de la corredoira que quiero que tu pelo brille como el jaspe. Berrea becerrá, berrea lo que quieras, que más berreará mi madre cuando vuelva a casa y vea que no he mercado lo que me había pedido, que no llevo los zuecos, ni los pantalones para los pequeños, que todo me lo he gastado en esa rapaza que me tiene toleando. Berrea becerra, pero no pares...."