jueves, agosto 26, 2010

COSAS DE CHIQUILLOS


" Cosas de chiquillos " dijo riéndose la madre Vicentito cuando le comentó la encargada de la guarderia que su hijo había clavado un lapiz en el brazo de otra niña.
" Cosas de chiquillos " fué la respuesta de la madre de Vicentito cuando a la salida del cole otra madre se quejó de que había roto las gafas de su niña.
" Cosas de chiquillos " de nuevo respondió la madre de Vicentito cuando la catequista se quejó de que bajase las bragas a sus compañeras en los salones parroquiales.
" Cosas de chiquillos ", que otra cosa iba a decir la madre de Vicente cuando el profesor de matemáticas se quejó de que hacía imposible las clases de su asignatura en el instituto.
" Cosas de chiquillos " volvió a responder la madre de Vicente cuando la profesora de música dijo que si no dejaba de putear el ambiente, lo echarían de la banda de música del pueblo.
" Cosas de chiquillos " dijo, ya no tan convencida, al médico de urgencias que había sacado adelante a Vicente de un colocón de pastillas y bebidas una noche de sábado.
" Cosas de chiquillos " dijo con miedo la madre de Vicente cuandos se presentó una pareja de civiles en su casa porque su hijo había roto la mandíbula de un puñetazo a otro chico dos años más joven que él que no quiso responder a su provocación. Y rabia cuando supo que la denuncia la había puesta una sudaca de mierda.
" Cosas de chiquillos " gritó la madre de Vicente a la trabajadora social del ayuntamiento que fué con el chivatazo de que su hijo trapicheaba con pastillas en la discoteca del pueblo.
" Cosas de chiquillos " dijo la madre de Vicente al gerente de las canteras cuando dijo que habían despedido a su hijo porque habían pillado a su hijo reventando las máquinas.
" Cosas de chiquillos " dijo con fastidio la madre de Vicente a su consuegra que vino con la moserga de que su hijo había dado dado de palos a su mujer.
" Cosas de chiquillos " dijo con humildad la madre de Vicente al funcionario de prisiones que revisó el paquete de comida que llevaba a su hijo enchironado por haberle reventado la nariz a su mujer.

Pues eso, " cosas de chiquillos ". Y la culpa siempre es de los demás: de la profesora que no ha sabido educarlo bien, del psicólogo que no ha acertado a controlar su agresividad, del entrenador del equipo de futbol que ha sido duro con él, del médico que no ha sabido curar sus catarros.....los culpables siempre están fuera de casa porque aunque Vicentito tenga cuarenta años sigue haciendo " cosas de chiquillos ".

4 comentarios:

relatosweb dijo...

Qué bueno, y más la reflexión última.
joder con el Vicentito de los 'güevos', si empezó con travesuras y terminó en la trena...
a esta joyita de la corona le mandaba yo con 'la Lomana', pero me da a mí que ni con esas.

P.D: Tomo nota respecto a Pedro, igual...hasta lo resucito para que le den su 2º Óscar. (ya veré, que tengo el poder jajajaja).

cal_2 dijo...

Anda, sé bueno y dale otra oportunidad a pedro......es una joya. Y gracias

El oso blandito dijo...

nene que durillo este tema!!!
<<<<<<<Pero que bueno!

Rubentxo dijo...

Hola, Carlos.
He llegado saltando de blog en blog hasta aquí y, cuando me he dado cuenta, me había leído casi todos los posts.
Me gusta mucho tu prosa: muy cuidada. Enhorabuena.
Este texto, para la reflexión. Qué fácil es tirar balones fueras y no asumir la responsabilidad de la educación. Me ha dado mucho que pensar, y se me ha ocurrido una idea para un relato, así es que GRACIAS.
El cuento de la colcha de ganchillo: tremendo, se me ha erizado todo el vello.
Espero leerte amenudo.
Saludos.