tag:blogger.com,1999:blog-17581105.post3991176342066016471..comments2024-01-15T10:00:46.417+01:00Comments on o sanxirole: A mi siempre me lo han contado asícal_2http://www.blogger.com/profile/15576527985085610490noreply@blogger.comBlogger5125tag:blogger.com,1999:blog-17581105.post-90110103771728121652009-02-28T21:23:00.000+01:002009-02-28T21:23:00.000+01:001. Gracias a pequeño porque añadio detalles que, a...1. Gracias a pequeño porque añadio detalles que, aunque parezca mentira, desconocía.<BR/>2. Anónimo al huerfanito Angel todavia se le puede conocer....para mi suerte llevo 36 años a su lado. Y tambien puedes conocer al pequeño-pequeño, que es una copia en pequeño ( y valga la redundancia ) del mayorcal_2https://www.blogger.com/profile/15576527985085610490noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-17581105.post-22862502257795538972009-02-28T21:00:00.000+01:002009-02-28T21:00:00.000+01:00Haber si no nos cambias tanto el formato de tu blo...Haber si no nos cambias tanto el formato de tu blog que nos vas a vovel locospequeñohttps://www.blogger.com/profile/08950664187392418529noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-17581105.post-24986293711990879122009-02-28T20:59:00.000+01:002009-02-28T20:59:00.000+01:00QUE BONITO RELATO COMO ME HUBIERA GUSTADO SALUDAR ...QUE BONITO RELATO COMO ME HUBIERA GUSTADO SALUDAR Y CONOCER A TODOS LOS PERSONAJES LOURDITAS SEÑORA CUSTODIA FERMIN Y SOBRETODO AL HUERFANITO ANGELAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-17581105.post-30719586066010475012009-02-28T11:00:00.000+01:002009-02-28T11:00:00.000+01:00Dios ¡¡ como me ha gustado tu comentario, anonimo....Dios ¡¡ como me ha gustado tu comentario, anonimo. Y como envidio no saber escribir tan bien como tu. Graciascal_2https://www.blogger.com/profile/15576527985085610490noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-17581105.post-90060674197215667472009-02-28T00:43:00.000+01:002009-02-28T00:43:00.000+01:00HermanosLa tarde era fría y negra como boca de lob...Hermanos<BR/>La tarde era fría y negra como boca de lobo en el pueblo. Los mellizos, que hacía unos meses habían tomado la comunión, y el más pequeño, un mocoso que apenas levantaba cuatro palmos del suelo, ayudaban como podían a cargar un camión sucio y desvencijado con las pocas pertenencias que la familia poseía. No entendían nada porque nadie había siquiera pensado en explicárselo. Sólo les dijeron que se iban muy lejos, a donde estaba esperando padre. Aquella última noche, los tres durmieron juntos, abrazados. Uno de ellos se meó, pero nadie se quejó ni dijo nada. Tanto era el miedo, tanto el desasosiego. Al amanecer, la lluvia no había cesado. Partieron en el coche del hermano de la madre, el único del que disponía la familia. Los ojos de los críos, como platos de barro negro contra las ventanillas empañadas por el frío.<BR/>En los primeros kilómetros, con las primeras curvas, la sotana que llevaba el conductor no puso freno a sus blasfemias: mi hermano vomitó toda la leche en polvo recién tomada sobre la tapicería nueva del Renault 8.Anonymousnoreply@blogger.com