jueves, febrero 28, 2008

NEGRA SOMBRA


Levanto la vista del libro y el cielo, que hasta hace un momento era límpido, casi transparente por la luz del sol, se ha vuelto tenebroso, plomizo. La línea de montañas del horizontes que todas las tardes tiene un tinte rosáceo, está borrada ahora por cortinas de lluvia y el valle se pierde entre la bruma. No puedo concentrarme de nuevo en la lectura y miró como hinoptizado la negrura que se cuela por el ventanal, que ahora no sé si procede del jardín o de mi corazón. Llueve con violencia, el agua bate fuerte contra la grava del jardín y las ramas de los árboles gimen sin saber bien hacia donde moverse, mientras Serrat desgrana una triste balada " Ruxiñol....". La tristeza se impone, el aire se impregna de melancolía y no entiendes nada, como es posible pasar de un cielo azul a esta negrura repentina inesperadamente. Solo queda no abandonarse a esta sensación de tristura con la confianza de que mañana, al abrir las hojas de la ventana, estará esperando la misma luz que da la vida.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Uauuu... intenso... sin palabras